Siendo una vidriera privilegiada del interiorismo y de la decoración, en esta muestra se revelan, además, los valores arquitectónicos y culturales de los más destacados artistas argentinos.
Texto: María Ducós – Fotos: cortesía Casa FOA
El espacio en el que vivimos es, sin dudas, el mayor cómplice de nuestras grandes alegrías y de nuestros amargos traspiés. La casa cobija nuestra historia, nuestros sueños y nuestros proyectos. Es acá dentro donde podemos ser transparentes, sin tapujos. Hace treinta años que Casa Foa muestra lugares que combinan eficiencia, utilidad y belleza, donde interioristas y decoradores exhiben su potencial creativo para imitar y aplicar en nuestros refugios diarios.
Antes de entrar, sobre la calle Basavilbaso, se vislumbra una casona del siglo XX, de arquitectura francesa, señorial y elegante. Adentro se alojan cuarenta espacios de looks contemporáneos y no tanto, desafiados a innovar en los metros asignados y velando por materiales nobles que aseguren un adecuado y responsable uso de los ambientes cotidianos.
Para muchos, la decoración está encorsetada en la idea de embellecer un espacio preexistente, pero este es un error muy común. Antes de vestir y acondicionar una casa, se tiene que hacer un trabajo de introspección, y conocer quiénes van a habitarla para plasmar sus necesidades y sus gustos en la composición. Así puede lograrse, además de la belleza, la utilidad de los espacios. La comodidad no se negocia.
Como nos contó Felicitas, de Canepa-Saint Cricq Estudio de Interiorismo, esta edición tiene un factor común y es que todos los espacios denotan calidez. Hay una convivencia armoniosa en la elección de cada detalle, lo que revaloriza la arquitectura original del edificio. “Los tejidos, el ladrillo a la vista, los calados en el papel y la chapa de hierro son las texturas que más se eligieron, y en la paleta de colores abundaron tonos oscuros, azules grises y hasta el negro”, resaltó la diseñadora.
Un recorrido arbitrario
El escritorio victoriano, de Javier Iturrioz, nos remite a la fascinante época de Sherlock Holmes, en el período de máximo esplendor de Inglaterra, durante la segunda mitad del siglo XIX. La iluminación, gracias a los tonos verdes de las paredes y los tapizados, refleja los mapas antiguos y los barcos de un estilo que se caracteriza por la exuberancia, los viajes, las colecciones y el disfrute de la vida. El mobiliario enaltece las maderas nobles, y los detalles decorativos, como bustos de mármol, borlas, flecos y terciopelos, resaltan la masculinidad y el gusto extravagante.
Otro de los espacios que me gustó mucho fue el cuarto de lectura, diseñado por las arquitectas María Ponce Quinteros, Marcela Rodríguez y Lorena Spinola. Con una biblioteca vertical que roza el techo, el ambiente está especialmente pensado para un amante de la lectura, la música y el cine. El único sillón que habita en esta atmósfera rectangular es lo suficientemente cómodo y mullido como para leer largas horas o para mirar una película con los pies apoyados en la banqueta que hace juego.
La terraza de elegante acero invita a unos tragos en una tarde de verano con los pufs tejidos en algodón como mobiliario predominante. Los diferentes diámetros, alturas y colores generan el dinamismo necesario entre llenos y vacíos que se equilibra con los jardines verticales de las paredes y las plantas acuáticas en los centros de mesas.
Con causa y tendencia
Hace treinta años que Casa FOA hace honor al motor que la vio surgir: recaudar fondos para la Fundación Oftalmológica Argentina (FOA) que tiene la misión de participar activamente en la prevención y lucha de la ceguera, investigando, capacitando y formando especialistas dentro de este campo. Hoy, además de lograr una gran colaboración a esta fundación, la muestra de diseño se cataloga como uno de los principales espacios donde convergen arquitectos, paisajistas y decoradores para compartir tendencias y creaciones.
—
Más información:
CASA FOA – del 23 de octubre al 30 de noviembre de 2015
http://www.casafoa.com»>www.casafoa.com
Basavilbaso 1233
Todos los días de 13 a 21 hs.
Jueves y viernes de 13 a 24 hs.
