Cuando deseamos homenajear a alguien o festejar algo, ponemos a prueba nuestra creatividad al elegir un regalo muy especial. Lo pensamos con anticipación y nos ponemos en la piel del homenajeado para sorprenderlo. En marzo festejamos el Día Internacional de la Mujer, momento ideal para regalar o regalarnos alguna planta que esté en flor y que podamos plantarla en canteros o en macetas. 

Elegí cuatro especies de diferentes colores en sus flores que, según sus necesidades de suelo y clima, están en su apogeo en el mes de marzo. ¡Acá vamos! 

• Salvia mexicana (Costa Rica Blue) 

Como su nombre lo indica, la floración es azul violácea durante el fin del verano y otoño. Con hojas grandes y verdes que necesitan ser tutoradas, suele tomar una altura superior a 1.80 m. Al plantarla en cantero, su distancia será 1m aproximadamente entre ellas. Para utilizarla en maceta, su altura deberá ser mayor de 40 cm de diámetro para que se desarrolle bien. Le gusta el sol de mañana hasta las 13 hs, y es fácil de reproducir por gajo en primavera. Será clave un buen drenaje, mucho compost y perlita en el suelo. Combinarla con gramíneas, miscanthus sinensis alba y gauras.  

• Anémona japónica (Anemone hupehensis)

Originaria de Japón, esta herbácea cubre rápidamente los canteros cuyo ph es ácido. Junto a las aquileas y helechos, lanzan sus flores rosadas y fucsias en marzo, tanto al sol como a media sombra. La flor se eleva por arriba de la planta, ideal para ubicarla debajo de ventanales. Su follaje está presente durante todo el año y tiende a rastrear, por lo que se puede utilizar como cubresuelo. En maceta, prefiere la forma redonda y de 30 cm x 0.30 cm de diámetro con mucho compost  y turba. 

• Wedelia trilobata (Sphagneticola trilobata)

El cubresuelo nativo para todo terreno. Le gusta el sol, la sombra, el agua y el suelo árido. Realmente es una planta que soporta y se desarrolla en todas las condiciones de suelo y clima. Rastrera, perenne, sus hojas son verde oscuro brillantes y la flor, amarilla, parecida a una margarita pequeña. Tiene un amplio periodo de floración que va desde la primavera al otoño. Ideal para colocar en taludes como contención de suelo. En maceta decora los bordes. Se puede ubicar  debajo de árboles o en aquellos sectores donde el césped no se desarrolla. Se multiplica en primavera y en otoño por esquejes. Super recomendada porque atrae polinizadores. 

• Rudbekia (Rudbeckia hirta) 

Su origen es Norteamericana, pero poco a poco va ganando protagonismo en nuestros jardines debido a la morfología de su flor color naranja. Tiene hojas con textura áspera, de color verde franco. Durante todo el verano hasta el otoño, avanzan y brotan sus flores parecidas a una margarita invertida. El secreto para una amplia floración es podar las flores secas. En invierno, las dejamos para decorar los canteros, aunque estén secas, ya que aportan color negro amarronado. Le gusta el sol, aunque soporta la media sombra. Su suelo debe ser húmedo y bien drenado. En primavera, podemos reproducirla con su semilla en almácigos, y hacer división de matas en otoño–primavera. Su altura es de 70 cm, con un diámetro 40cm. Se puede ubicar en cantero junto a achilleas, stipas, salvias y asters. Para maceta, es importante tapar su base con bulbines o roelias repens. Atrae muchas mariposas debido a su llamativo color. 

María Laura Vidal Bazterrica – Paisajista – @itasflowers

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