Texto: Mónica Fernández – Ilustraciones: Nicolás Bolasini
Los tips que ningún viajero se debe perder. Planificar con anticipación es la mejor estrategia para ahorrar dinero. Poniendo en práctica algunas recomendaciones de expertos, se puede hacer rendir más el presupuesto para las vacaciones. A qué lugares conviene ir en enero y febrero, cómo conseguir mejores tarifas en los pasajes de avión y qué apps no nos pueden faltar antes de emprender el viaje.
La primavera pide pista y con los días más largos y la llegada de los primeros calorcitos, nos brotan los deseos de planificar y pensar en las vacaciones de verano. Sea en plan familiar, en pareja o con amigos. Gasoleras o con la billetera un poco más suelta. Los posibles destinos nos revolotean por la cabeza…
¿Contratar con meses de anticipación o esperar las ofertas de último momento? ¿Días de playa o aprovechar la contra-temporada para conocer nuevas ciudades con temperaturas gélidas pero mucho encanto? ¿Hay algún truco para conseguir pasajes más baratos? Y las millas que nos dan las tarjetas de crédito, ¿sirven realmente o son puro cuento? Tigris preparó una guía completa con la opinión de expertos en turismo para lograr maximizar el presupuesto y armar un buen programa sin dejar la cuenta bancaria al rojo vivo.
El primer consejo es tomarse el tiempo necesario para decidir el destino, averiguar por alojamiento, atracciones y precios, y sacar los pasajes en forma anticipada, si es que el viaje no lo vamos a hacer en auto. Esto aplica especialmente a las familias y a las personas que tienen su período de vacaciones en el trabajo pautado para determinada fecha. “Planificando con tiempo podemos aprovechar las cuotas y viajar con la mayor parte del viaje ya pagado. Además nos evitamos los aumentos que pueda haber más adelante”, arranca Marcelo Grether, director comercial de Avantrip.com. “Hay que tener en cuenta -aclara- que los vuelos se pueden visualizar hasta diez meses antes de la fecha programada para el viaje”.
Las compras de último momento quedarían reservadas para los viajeros con mucha flexibilidad de fechas y posibilidad de levantar campamento sin más preparación que poner algo de ropa en una valija. “Esperar permite aprovechar la oferta de último minuto, pero uno tiene que estar preparado a que posiblemente la disponibilidad de fechas sea mucho menor”, explica Grether. Claro que en estas circunstancias tampoco será lo mismo buscar uno o dos lugares, que plazas para una familia entera o un grupo de media docena de amigos.
En cuanto a costos, el uso de los buscadores específicos, comparadores de precio y empresas de planificación y venta de viajes online como Despegar.com, Avantrip.com, TripAdvisor.com, Trivago, o las más específicas de reservas de hoteles como Booking, Hoteles.com o Expedia.com, entre otros, nos pueden hacer ahorrar unos cuantos pesos y también abrirnos los ojos a una posibilidad que quizás no habíamos contemplado de entrada. Por ejemplo, al comenzar a buscar hotel en cualquier destino, quizás descartamos de plano los más lujosos porque pensamos que escapan a nuestro presupuesto. Muchas veces al entrar a los buscadores encontramos que hay una “oferta estrella” u “oferta secreta” que por el mismo precio nos permite acceder a un servicio de lujo que no teníamos contemplado.
“Nuestro servicio se basa puramente en la comparación de precio de hoteles”, explica a Tigris Leila Marchetti, a cargo de las relaciones públicas de Trivago Argentina. “Podemos afirmar que utilizando nuestro website gratuito, el usuario puede ahorrar un promedio del 35% por reserva de alojamiento”. Trivago funciona como una plataforma en la que aparecen muchas posibilidades de distintos proveedores para un mismo destino.
En lo que hace a la compra de pasajes en avión, la ilusión de llegar a viajar “gratis” con las millas, puntos o kilómetros acumulados siempre está presente. Pero atentos: los programas de fidelidad de las aerolíneas, que van atados muchas veces a acuerdos con los bancos emisores de tarjetas de crédito, no son para cualquiera. Dan resultado o bien para quienes realmente viajan mucho (por ejemplo por trabajo) y lo hacen en una misma compañía o alianza, o para quienes tienen un alto consumo con tarjeta de crédito mes a mes. De otro modo, es difícil llegar a la meta. Los vuelos de cabotaje son más accesibles. Con lo cual es mejor, dentro de lo posible, sumar “puntos” con compañías que cubran también destinos nacionales. Si el programa al que uno está asociado suma a través de los consumos de tarjeta de crédito, conviene poner en débito automático la mayor cantidad de servicios para convertir los gastos fijos del mes en más oportunidades.
Calendario de oportunidades
Siempre en tren de lograr los mejores resultados, consultamos a los expertos en viajes sobre qué momentos del año son más baratos en determinados destinos.
Aunque hay más de un factor que influye en la formación de precios tanto de hoteles como de pasajes en avión, en general las épocas de frío en el lugar de destino suelen ofrecer tarifas mucho más convenientes. La única excepción es la época de Navidad y Año Nuevo en la que con frío o con calor, con playa o con nieve, escalan los precios.
“En nuestras vacaciones de verano, se suelen encontrar en Europa mejores precios porque es invierno; es la temporada baja. Lo mismo sucede con algunas ciudades de Estados Unidos”, aporta Grether de Avantrip y aclara que dentro de EE.UU., Miami suele presentar sus precios más económicos en junio y septiembre.
¿A dónde conviene viajar en enero y febrero? Según un calendario que elaboró Trivago.com, ciudades como Los Ángeles, San Francisco, Nueva York o Chicago presentan mejores precios que en otras épocas del año. Si el objetivo es descubrir el Viejo Continente, el verano argentino también puede ser una oportunidad. Trivago apunta Roma, París, Londres, Barcelona y Varsovia, entre otras. En cambio no será para nada económico viajar a Cancún, Cartagena, Nassau, Dubái, Tokio o Bangkok.
Si la idea es disfrutar de sol radiante y no aprovechar la temporada baja de otros destinos, conviene saber también que no todos los destinos son igual de amigables con el bolsillo. Punta del Este y el norte de Brasil (zonas como Maceió, Porto Galinhas, Pipa, Natal, Praia do Forte) son los destinos más caros dentro de Sudamérica. En la Argentina, Cariló marca lo más alto de la vara para la Costa Atlántica y en el sur del país, El Calafate, Villa La Angostura, San Carlos de Bariloche y Ushuaia se mantienen entre las ciudades más caras para vacacionar aunque uno podría pensar que su temporada fuerte es el invierno. Córdoba y Mendoza se anotan entre las más económicas para pasar el verano.
Un dato a tener en cuenta si se va a viajar al exterior es que, pagando los servicios (sea hotelería, alquiler de autos o pasajes de avión) antes de diciembre -aunque el viaje se haga en febrero o en marzola percepción del 35% que hará la AFIP como adelanto del Impuesto a las Ganancias o a los Bienes Personales, se podrá aplicar en abril/mayo del año siguiente (2016, en este caso). En cambio, si se paga en enero, la percepción se recuperará recién en abril/mayo de 2017.
Otro punto a resaltar en la planificación de un viaje es que, al comparar y buscar precios, si se trata de destinos en el exterior, a las tarifas que los buscadores online nos pasan por un hotel o el alquiler de un auto, hay que sumarle el 35% de la percepción que nos llegará en el resumen de cuenta de la tarjeta de crédito. Esto puede confundir respecto de valores que publican las agencias de viajes que suelen incluir el impuesto en sus presupuestos.
Con las APPS a cuestas
La tecnología es también una gran aliada en los viajes. Tanto en la planificación previa como durante las vacaciones, las apps descargadas a los dispositivos móviles nos permiten hacer un cambio en la reserva del hotel hasta verificar los horarios de los vuelos y evitarnos cargar con montones de papeles y vouchers. Actualmente, la mayoría de las aerolíneas y aeropuertos ya permiten abordar sólo presentando el código QR (Quick Response Barcode) en la puerta de embarque, ¡sin necesidad de llevar el boarding pass! Lo mismo sucede con los hoteles: las reservas están en nuestro teléfono o tablet y así se presentan en el mostrador a la hora del check in.
Otro aporte interesante de las planificaciones tech son las opiniones de otros viajeros. Si bien siempre debemos investigar y cotejar con más de una fuente, en general, las opiniones de otros viajeros suelen orientarnos muy bien en cuanto al servicio del hotel, la limpieza o la seguridad o no de la zona en la que está ubicado. Un elemento más para evaluar y decidir entre distintas opciones.