Texto y fotos: Sofía Stavrou
Si visitás París, es obligatorio reservar un día para el famoso Chateau de Versailles y sus jardines eternos (¡es como una mini ciudad dentro de otra ciudad!). Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es una joya histórica de Francia que te transportará a otra época y dejarte boquiabierto mientras explores cada uno de sus rincones. A continuación te compartimos una guía práctica para que aproveches al máximo tu visita a la ciudad real ¡Bon voyage!
INFO ÚTIL:
– El Palacio de Versalles abre todos los días desde las 9 am, excepto los lunes y el 1° de mayo.
-La entrada general cuesta 18 euros y es recomendable comprarla online acá, así ahorrás tiempo y filas. Los menores de 18 años y los residentes europeos, entran gratis.
-Llevá un calzado cómodo ¡vas a caminar muchísimo!
-Hay lugares para comer pero también podés llevar tu propio picnic.
-Lo ideal es dedicarle un día completo: salir temprano desde París con la línea de tren Versailles Chantiers (aproximadamente 45 minutos).
LO QUE NO TE PODÉS PERDER:
– EL PALACIO: el chateau del siglo XVIII es una mansión imponente que merece un recorrido guiado para entender su historia y los secretos de la realeza (7 euros adicionales a la entrada general). No te pierdas el hall de los espejos, las habitaciones de Luis XIV, el salón de Hércules y la capilla real.
– LOS JARDINES: son más de ochocientas hectáreas entre campos verdes, laberintos de árboles, estanques y fuentes. Hay diferentes opciones para recorrerlos: caminando, en bicicleta (las alquilan ahí mismo), en auto eléctrico o en el trencito que recorre los senderos de los jardines (esta última opción es la más divertida si viajás con chicos). En temporada alta hay shows de música y de fuentes.
– EL GRAN TRIANON: uno de los palacios más coquetos y femeninos de Versalles que forma parte de los dominios de María Antonieta. No te pierdas sus jardines de flores, el jardín de invierno y la glorieta sobre la laguna ¡para enamorarte!
– LA ALDEA: un refugio en donde Maria Antonieta, la mujer del rey Luis XVI, disfrutaba de una vida campestre y de las cosas más simples. Con el estanque y la granja, parece un mundo aparte y es uno de los espacios con más paz de todo el complejo real.
-LAS MEJORES VISTAS: la foto en perspectiva y las vistas más alucinantes se consiguen desde el parterre de agua, en lo más alto de los escalones de la Fuente Latona.
Si querés pasar un día de reyes, no dejes de visitar Versalles y sumergirte de lleno en la historia real de Francia ¡Te va a fascinar!