En El Encuentro, el hogar de una decoradora y su familia. Un patio de acceso de ensueño, aberturas con arcadas, amplios pasillos y abundante luz. Una casa plagada de estilo y rincones de detalles que conquistan.

En esta casa de El Encuentro conviven el crudo y el blanco, el hierro y la madera, los patios internos y las grandes ventanas de hierro repartido. Una arquitectura con base provenzal, de campiña francesa que nos traslada a otra época.

Una casa de materiales nobles y orgánicos. Con ambientes de muebles cálidos y tejidos autóctonos. Un hogar en santa Bárbara cargado de identidad, naturaleza y bienestar.

En los suburbios de Chapadmalal, en el creciente barrio Arenas del Sur, una casa recién terminada nos recibe. En su interior, capitoné, mármol y porcelanato. 

Cada rincón es un cuadro, igual que los que pinta la dueña de casa. En este hogar de San Isidro Labrador la premisa es buen gusto y creatividad. Puertas abiertas a la imaginación, y una gran dosis de estilo y de arte.

Emprendedoras que crean un ambiente o disfrazan tu jardín. Espacios alegres, floreados, elegantes y divertidos.

Elegimos estos seis baños porque tienen buenas ideas y propuestas fáciles de imitar. Con un poco de imaginación y mucho de buen gusto se puede lograr que este ambiente, rezagado casi siempre, pase a ser agradable y atrayente.

Porque todo pasa en la cocina, porque allí se gesta el calor de hogar y porque de allí salen los sabores que conquistan corazones, la cocina es la elegida del mes. 

Una arquitectura racionalista, de formas geométricas simples y despojada. En una de las islas de Santa Bárbara, sobre un espejo de agua que parece no tener fin, esta casa contiene un hogar esencial, práctico y funcional. Adentro, su decoración y detalles enamoran a primera vista.

Una arquitectura que plantea misterio y sorpresa a través de sus efectos. Volúmenes blancos, patios, planos unidos por escaleras y un paisaje de ensueño. En Santa María de la Aguada, y frente al lago.

Entrar al barrio y que de repente esa primera maqueta fiel que acompañó en las reuniones de Eidico Casas se estire hasta cubrir un paisaje completo. Quien conoce la historia del proyecto y hoy recorre la calle Italia siente una especie de escalofrío al ver lo que finalmente se fue gestando en este lugar. Una sumatoria de historias, particularidades y nuevas amistades.