En esta casa de El Encuentro conviven el crudo y el blanco, el hierro y la madera, los patios internos y las grandes ventanas de hierro repartido. Una arquitectura con base provenzal, de campiña francesa que nos traslada a otra época.
Este año, la ciudad se llena de buzones, árboles de deseos, ferias navideñas, shows y espacios gratuitos que invitan a sumergirse en la magia de diciembre.