En pleno verano disfrutamos del sol, de los espacios abiertos y con ellos de las flores. De a poco vamos conociendo los nombres de las especies florales y su comportamiento. Para contar con un jardín sano, productivo y en desarrollo, es necesario conocer los orígenes y el manejo de las plantas. En esta nota, cuatro herbáceas de muy fácil mantenimiento.

Las herbáceas, esas plantas sin tallos leñosos, son un gran elemento en canteros y borduras. Su amplio período de floración facilita puntos focales en los diseños en masa. Además, sus flores atraen mariposas, polinizadores y aves. ¿Qué especies pertenecen a este grupo?

Bulbines caulescens 

Se adaptan a cualquier suelo y lugar dentro del jardín, siempre que tenga sol y media sombra. Su porte llega a los 30 cm de alto y de ancho. Sus flores empiezan en primavera y se conservan hasta el invierno. Las hay en colores amarillos y anaranjados, y funciona en todo tipo de suelo, hasta en los alcalinos. Es importante levantar, cada 3 años, la mata en otoño y realizar una división para rejuvenecer la planta. Atrae picaflores.

Su uso: ideal para final de canteros, donde se busca resaltar el diseño. Funciona mejor en matas plantadas cada 40 cm entre ellas.

Combinaciones: en el cantero podemos mezclarlas con Iris germánica amarilla, Achilleas millefolium, Hemerocallis, Aquilegia vulgaris, Echinacea purpurea, Kniphofia uvaria y Euphorbia palustris.

Secreto: en maceta es muy recomendable porque tapa sus bordes, ideal para cuando tenemos macetas viejas o dañadas. 

Erigeron karvinskianus 

Es una herbácea de amplia floración. Sus flores parecen margaritas pequeñas de color blanco-rosado, y en general persisten todo el año en la planta. Le gusta el sol y la media sombra con un suelo bien drenado y rico en compost y humus de lombriz. Funciona muy bien en diseños rocosos, y atrae mariposas.

Su altura es de 15 cm y tiene un diámetro de hasta 50 cm. Es de porte rastrero, y cada dos años se deben realizar divisiones de mata en otoño o en primavera. 

Combinación: con Dietes bicolor, Hemerocallis, Agapanthus, Salvia greggii. 

Secreto: ideal para tapar los desniveles de una escalera.

Gaura lindheimeri 

Planta muy florífera que atrae abejas y mariposas. Florece en primavera, en verano y en otoño. Es de color blanca o rosada, y esta última es de porte más bajo. 

Es muy llamativa su floración, por eso es ideal trabajarla en masa a distancia. Nunca ubicarla al lado de la pileta porque atrae abejas en cantidad. 

Se divide todos los años en otoño y en primavera. En verano, cuando termina la floración, se poda para que prolongue sus flores hasta el otoño avanzado. 

Combinación: con cualquier tipo de Salvias, Gramíneas y rosales.

Secreto: siempre conviene podar la planta aunque esté en flor. 

Zantedeschia aethiopica

Conocida como Cala, es la herbácea de texturas más grandes y flores blancas tan deseadas por los diseñadores. Existen de varios colores en el mercado. 

Sus hojas son verde claro brillante, con forma de corazón. Le agrada mucho la humedad del suelo y un ambiente de sombra y media sombra. En estanques, su flor perdura más tiempo. 

Su suelo ideal es de un pH ácido con mucha materia orgánica. Es importante dividirla cada tres años para que tome fuerza su mata. Su altura varía de 60/80 cm a 1.20 m. Atrae picaflores. 

Su uso: en patios sombríos, canteros a distancia para que iluminen con sus flores blancas. 

Combinación: Hortensias, Acanthus y Caña de ambar. 

Secreto: regar cada mes con agua con vinagre. 

El jardín tiene sus secretos interminables, será por eso que cada día nos atrapa más. ¡Hasta la próxima!

María Laura Vidal Bazterrica – Paisajista – @itasflowers

Contacto: 15-4991-6073 – marialauravidal@hotmail.com