Desde Tigris, nos encanta destacar proyectos que inspiran. Esta casa, diseñada por Grupo Pauta, es un gran ejemplo de cómo el diseño puede dialogar con el entorno natural, integrando arquitectura y paisajes de forma fluida y moderna.
El juego de volúmenes fue clave en este proyecto, buscando que tenga movimiento. Es por eso que se hizo especial foco en el revestimiento de la fachada de la planta baja donde buscó resaltar estos elementos con siding, un material cementicio que imita la veta de la madera. Se opto por pintarlo todo de blanco y agregarle algunos elementos en negro para un contraste elegante y atemporal.
Desde el ingreso, la protagonista es la laguna de Santa Ana, un paisaje imponente que da la bienvenida y se integra a través de amplias aberturas que conectan el exterior con el interior.
El diseño también apuesta por la funcionalidad y el disfrute. Las puertas corredizas permiten unir la cocina con otros espacios cuando se desea, mientras que la galería amplia invita a recibir a la familia y amigos. El cielorraso de maderitas en negro aporta un toque moderno, combinando calidez y sofisticación.
En el exterior, el solárium se ubica estratégicamente cerca de la laguna, separado de la pileta para mayor comodidad, y se añadió un espacio único: un fogonero, ideal para disfrutar de reuniones al aire libre y tardes inolvidables.
Gracias Grupo Pauta por acercarnos este proyecto que, sin dudas, resalta la conexión entre diseño y naturaleza, ofreciendo un estilo de vida en equilibrio con el entorno.