Texto: Cristina Azar – @cristinaazar
“Si estás deprimido estás viviendo en el pasado. Si estás ansioso estás viviendo en el futuro. Si estás en paz estás viviendo en el presente” Lao Tse.
Te levantás corriendo a desayunar, no sos consciente de lo que tomás. Decidís darte una ducha y sin motivo alguno convertís tu baño en una oficina: este pasa a ser un espacio en el que repasás la infinita lista de tareas que te esperan para ese día.
Subir al auto equivale a poner tu mente en piloto automático, simplemente andás. Llevás a los chicos al colegio, pero ni disfrutás de su presencia, tu cabeza sigue “a mil”.
Parece que vivimos en un mundo en el que ser multitasking equivale a ser exitoso. Qué irónico ¿no? Resulta que se premia la velocidad y el resultado final, cuando lo ideal y lo más importante es saber disfrutar del camino.
¿Qué significa “Mindfulness”?
Es la traducción al inglés de la palabra Sati, que en “pali”, la lengua que hablaba Buda 2500 años atrás, significa: “prestar atención para ver las cosas como son”.
Es una práctica que nos invita a estar atentos a las acciones del presente con intención, aceptación y curiosidad, dejando los juicios de lado para entender hasta qué punto nuestros pensamientos alteran la percepción de la realidad. Parece casi imposible hoy en día poner atención plena a lo que uno está haciendo, ¡pero créanme que se puede lograr!
Si bien este concepto proviene de una tradición budista, no es una religión. El Mindfulness consiste en explorar nuestra mente para saber qué cosas la sanan y cuáles la enferman.
Son maravillosos los hallazgos de la neurociencia sobre los efectos positivos que produce esta práctica ancestral, tanto en el cerebro como en el cuerpo.
¿Cuál es su fin?
Hace ya un tiempo que esta técnica se aplica en otros países del mundo como método para mejorar la salud, regular las emociones, combatir el estrés, la ansiedad y la depresión. No es una práctica solo para adultos; en algunos colegios se les enseña a los niños a meditar.
Varias empresas de gran nivel implementan el Mindfulness para lograr mayor rendimiento; está comprobado que aumenta la eficiencia, generando un nivel más alto de atención y concentración, y por consiguiente, una mayor predisposición a la creatividad.
Hacer foco en el presente nos mantiene más equilibrados ante los hechos inesperados y ante los conflictos. Mejora las relaciones personales con nuestra familia, pareja y amigos, ya que se desarrolla la capacidad de empatizar, agradecer y perdonar.
Si bien en los cursos de meditación se proporciona una serie de herramientas para trabajar, es necesario ponerlo en práctica y contar con energía para lograr cambios. El Mindfulness es realmente una forma de vivir.
¿Cómo implementarlo?
Algunos consejos para ponerlo en práctica:
- Comenzá el día prestando atención a tus rutinas, ya sea al desayuno, baño o actividad física, al menos por cinco minutos.
- Si caminás, intentá hacerlo de manera consciente; sentí tus pies en el suelo y tus piernas en movimiento. ¡Notá tu respiración!
- Cuando estés comiendo, masticá lentamente, sentí los sabores y los aromas.
- Observá tu respiración. Pensá por donde entra y sale el aire.
- Agendá los asuntos pendientes para no trasladar los problemas.
- Si es posible, al llegar a casa cambiate de ropa. Compartí momentos con los tuyos, mírense y préstense atención mutuamente.
Contacto
Cristina Azar – Cursos de Mindfulness, manejo de emociones.
Clases individuales, grupales y para empresas.
FB: Cristina Azar
Instagram: @cristinaazar
Tel: 1550458502
Mail: azar.mariacristina@gmail.com
Estoy muy emocionada y feliz que el destino me haya puesto la oportunidad de conocer a Cristina para cambiar mi vida y empezar a vivir plena en cada momento..