Artesanal y de buen gusto, los productos de @charlesbyceline reivindican el campo y su naturaleza en una paleta de colores suave y amena. Cuando la vocación se une al talento, surgen proyectos que, de tanto amor por los detalles, las recompensas no se hacen esperar.

Multiplicar aquello que nos oxigena, darle brillo a nuestro talento más innato. Por esa huella fue transitando Celine su camino profesional y emprendedor. Licenciada en Economía Agropecuaria, fue siempre una enamorada de la naturaleza, el campo y los pequeños detalles que hacen que la vida sea más colorida, más rica. “Supongo que nuestra esencia siempre aflora”, se sincera. Porque esa pasión por la vida al aire libre, por el jardín, por los viajes, sumado a una gran cuota de sensibilidad y estética, y un gran talento artístico fueron los condimentos esenciales para crear @charlesbyceline, un emprendimiento que honra, a través de textiles estampados a mano, aquellos momentos cotidianos en los que se cuentan historias infinitas. 

Con un don especial para trabajar el color, su marca es el resultado de todo aquello que la hace sentir viva. Libélulas, pájaros, magnolias, corales se cuelan en un almohadón, en un mantel, en un repasador. Desde chica, el diseño y el arte forman parte de su rutina. Pintó en porcelana durante doce años, para después darle una oportunidad a la estampa textil, de donde nunca más se alejó. A base de cursos de diseño con la gran Rosa Skyfic, una de las creadoras de la cátedra de Diseño de Indumentaria en la FADU, fue incursionando en este apasionante mundo que plasma con dedicación en su cuenta.


Siempre en la trinchera

Cuenta que se levanta muy temprano, al alba, porque sino el día no rinde. Y este podría ser el subtítulo de su vida. Una vida que siempre supo de agendas intensas, horarios exigentes, grandes resultados. Porque durante veinte años, Celi tuvo una rutina en la que fichar y figurar detrás de una computadora era moneda habitual. Fue una época de enormes sacrificios, pero también de reconfortantes aprendizajes. Y claro está que esos desafíos marcaron y sellaron su forma de trabajar.

Y para que este proyecto se haga realidad, su dedicación fue total. Junto a sus asistentes para manejar la tienda, atender clientes, entregar pedidos, es ella quien está detrás del diseño de las estampas, la creación de los manteles, las paletas de colores, el armado de fotos y contenidos. Todo lleva su impronta, su ojo crítico, su incansable propuesta de mejora.

Innovar es la cuestión

Del taller en el subsuelo de su casa salen las mejores creaciones pintadas a mano. Allí despliega su magia y allí también expone su showroom. Su producto estrella es el mantel, que con sus muchas variantes se convirtió en un clásico. Necesita estar muy encima de los costos, intenta controlarlos lo mejor posible porque sabe que la mayoría de los emprendimientos se truncan por querer ir más rápido de lo que exige el proyecto. 

Inquieta y autoexigente, siempre está mirando qué otro producto, técnica o sistema puede incorporar. Para ella investigar y averiguar, meterse a fondo en las tendencias es parte de su trabajo y una de las partes que más disfruta. A la vez, establecer límites en una época donde éstos parecen estar desdibujados, es una de las metas que se propuso. 


Audiencia y proyectos 

No puede estar más agradecida con su audiencia por tantas muestras de cariño y aliento. Pero también en esa exposición, nos cuenta, se esconde la presión por no defraudar y seguir siendo relevante. Y en ese camino de a poco se va soltando, y aunque le cuesten las cámaras, va deslizando lentamente algunos aspectos de su vida más allá de su emprendimiento. 

Los próximos proyectos en esta mente tan creativa no paran de brotar, pero apuesta a seguir afianzando el emprendimiento y lograr exportar su producción a varios lugares del mundo; a generar más y más redes y poder ofrecer trabajo a mucha gente. 

Su agradecimiento principal va para su familia, compuesta por su marido y sus hijos; sus padres y hermanas, y algunas amigas íntimas que confiaron en su idea y en su capacidad, y la invitaron a creer en ella misma. 

IG: @charlesbyceline