Oriunda de Chivilcoy, María Sol Marino se graduó como Diseñadora Gráfica en la UBA. Luego de atravesar diferentes experiencias laborales en la gran ciudad, se lanzó a armar agendas con diseños propios y creó oportunamente Eme Papel (@emepapel), un emprendimiento que ofrece cuadernos, agendas y papelería de ensueño. 

Con 18 años de edad, se desprendió de su querido pueblo para estudiar Medicina en la Universidad de Buenos Aires. Pero en el segundo año de la carrera, María Sol intuyó que esa no era su vocación, y que algo diferente esperaba por ella. “Todo el tiempo restante a estudiar hacía cosas manuales como dibujar o bordar, nada que ver a la medicina” nos cuenta.

Volver a empezar

En 2014 dio un giro 360 en su vida y comenzó con Diseño Gráfico, carrera que poco tenía en común con la anterior. No tardó en graduarse y embarcarse en el mundo laboral. Luego de adquirir experiencia como diseñadora en un equipo de prensa, empezó a trabajar de manera freelance para un estudio gráfico, lo que le permitió cumplir uno de sus sueños: volver a vivir en el interior. 

Pero en paralelo a aquellos trabajos, otra motivación siempre estuvo latente. En agosto de 2018, la protagonista creó una cuenta de Instagram con el simple propósito de mostrar algunas de sus creaciones, sin imaginar lo que sucedería después. María Sol había realizado cuatro cursos de encuadernación, que al combinarlos con sus habilidades en el diseño, desencadenaron el armado de agendas 2019 para la venta. Sus primeros compradores fueron familiares y amigos, y otros que a través de las redes se enteraban sobre el nacimiento de aquel éxito en potencia.

Con nombre y todo

Para 2020, el perfil de Instagram cambió su nombre de origen por @emepapel, y se convirtió oficialmente en una marca de agendas, cuadernos y papelería con estilo y tipografías propias, cuyos diseños se superan el uno al otro.

“La primera pieza fue un cuaderno que hice para mi. Cuando lo usaba me lo halagaban, pero me daba vergüenza decir que lo había hecho yo”, nos relata María Sol. Si bien confiesa que nunca le resultó tarea fácil exponerse, se abocó 100% al emprendimiento una vez que entendió que por acá pasaba su felicidad todos los días. 

El equilibrio justo

Hoy con 29 años, y dedicada full time a este lindo proyecto, vive la mitad del tiempo en el pueblo y otro tanto en el campo, su mayor fuente de inspiración. Vende sus productos principalmente a través de la tienda online, que duplicó sus expectativas y le permitió acortar las distancias con los compradores.

Entre las personas con las que está agradecida, hace mención especial a su abuela materna, que desenmascaró su lado creativo al mostrarle rubros como el tejido y el bordado. También agradece la incondicionalidad de sus padres. Cuando se lanzó a emprender, habían pasado solo 3 meses del fallecimiento de su papá; desde ese momento, la emprendedora supo que él la acompañaba desde el cielo. También nombra a su novio que es quien, entre otras cosas, le prometió que siempre tendría conexión a Internet, sea cual sea el campo en el que se encuentren.

Con convicción, la creadora de @emepapel cuenta que seguirá trabajando con el objetivo de acompañar a muchas personas en su día a día. ¿Próximos proyectos? ¡Miles! Pero si a corto plazo hablamos, lanzará en breve una nueva línea de cuadernos y planners, que contienen material clave para tener días más productivos y organizados, además de la agenda 2022 que ya está en su cabeza.

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Por Clara Almasqué