Los patios y terrazas en los hogares son cada vez más utilizados. Al pasar más tiempo en casa, hacemos de ellos un uso prácticamente diario. Vale la pena entonces convertirlos en espacios más trabajados, decorados y con plantas que los habiten. Los escalones y senderos tampoco deberían escapar al diseño. Si bien funcionan como vínculo entre la casa y el jardín, ¿por qué no aprovecharlos también como factor decorativo?

A continuación, algunos consejos para llevar a cabo un mantenimiento apropiado de los senderos, escalones y baldosas para gozar de cada rincón.

Mantenimiento de senderos

Si reciben sol durante pocas horas en invierno, los senderos se vuelven resbaladizos y peligrosos por el exceso de agua retenida y la presencia de algas. En esos casos es necesario barrerlos con un cepillo con agua, sin tóxicos que puedan resultar perjudiciales para la biodiversidad del jardín. Una vez despejado el camino, se recomienda aplicar arena gruesa sobre la superficie. Si la presencia de agua es permanente, chequear el declive y el drenaje; y asegurarse de que ninguna canilla esté funcionando incorrectamente.

¿Cómo combatir las malezas?

Las malezas son, generalmente, difíciles de remover. Si se presentan en pequeñas cantidades, es conveniente quitarlas manualmente con un cuchillo de cocina de hoja gruesa. Lo ideal es hacerlo luego de una lluvia, cuando las raíces están aflojas.

Si las malezas abundan, recurrir a los productos específicos que se ofrecen en el mercado para combatirlas. ¿Una opción orgánica? La mezcla de cal y vinagre con agua.

¿Qué hacer con las baldosas que se rompen?

Si bien podemos reemplazarlas por nuevas, muchas veces no logramos conseguir ejemplares de la misma partida. ¡A no desesperar! La salvación está en ser creativos. Levantemos aquellas baldosas que están rotas, estropeadas o hundidas. Es importante limpiar y remover todo tipo de cemento o minerales que hayan quedado, y luego agregar compost en esos sectores para sembrar flores como Amapolas, Niguelas, Lobelias, Alegrías del Hogar, Geranios, o hasta aromáticas como la menta, ajo, puerro, orégano o tomillo, que además de decorar, nos proveerán de un rico perfume.

¡Manchas fuera!

Generalmente debajo de la mesa o de la parrilla suelen verse manchas de alimentos —¡rastros de buenos asados!—. Un cepillo o escoba de pelo rígido serán suficientes para hacerlas desaparecer. Si permanecen allí desde hace mucho tiempo, podemos combatirlas con detergente.

Tip: Para la zona de la parrilla, es recomendable elegir baldosas multicolores. Así se disimula más la suciedad.

Iluminar, ¡siempre!

Iluminar los patios y senderos no es un ítem menor. La luz nos permitirá contemplar las tardecitas otoñales y disfrutar por más tiempo del patio o la terraza.

Si recibimos sol por largas horas, es ideal colocar paneles solares para ahorrar energía. Las velas, antorchas o faroles pueden servir de refuerzo y generar un clima romántico. En caso de utilizar electricidad de la casa, siempre implementemos luz de bajo voltaje.

¡Ojo! No abusemos de la iluminación. Podríamos llegar a crear un entorno navideño en todo el exterior sin darnos cuenta.

Hay muchos tipos de luces para iluminar árboles, escalones o senderos. Es importante asesorarnos con profesionales en la materia.

María Laura Vidal Bazterrica – Paisajista – @itasflowers

Contacto: 15-4991-6073 – marialauravidal@hotmail.com