Estuvimos de IG Live en un jardín de Altamira, el segundo barrio de @eidico en construirse, junto con María Laura Vidal Bazterrica (@itasflowers). Aprovechamos la oportunidad para interiorizarnos con las tareas que debemos realizar durante los meses de abril y mayo, antes de que las heladas y el frío invadan nuestro jardín. Pasen a ver el vivo completo haciendo clic acá.

El jardín protagonista, ubicado sobre una esquina, ya estaba previamente diseñado por otras paisajistas que, como asegura Ita, hicieron un gran trabajo. María Laura hace énfasis en la importancia de respetar la labor de sus colegas. Remarca que, si bien uno puede hacer cambios o reordenar ciertas especies que no funcionaron, no hace falta destruir lo existente; eso significaría un golpe muy fuerte al ecosistema. “Lo ideal es respetar y continuar sobre lo antes trabajado, agregando la propia impronta”, comenta.

¿Por dónde empezar?

Micronivelación

Esta tarea se realiza en otoño o primavera. Se lleva a cabo para nivelar y drenar el suelo. ¿Cómo se hace? Colocando arena mezclada con compost en partes iguales sobre el jardín. Un consejo: No usar tierra negra, esta puede contener malezas.

La zona de jardín sobre el que se trabajó en este caso, tiene mal drenaje, lo que provocaba la acumulación de agua.

Poda y división de herbáceas

Consiste en dividir ciertas especies y trasladarlas, con el objetivo de multiplicarlas y darle vida a nuevos sectores del jardín. Con esta simple tarea podemos generar nuevos y lindos canteros; solo hace falta tener timing y hacer las divisiones en la época del año adecuada. Algunas de las especies que podemos dividir son: Agapanthus, Hemerocallis, Salvia.

En este caso, se buscó principalmente reciclar y ordenar la estructura, reutilizando las plantas existentes, y agregando un 30% de otras nuevas.

Manos a la obra

Mientras disfrutamos de una mañana templada en Altamira, María Laura aprovechó para mostrarnos de manera concreta, algunas de las partes del jardín que intervino.

Nuevos espacios

Así como vamos modificando la decoración de nuestras casas por dentro, @itasflowers sostiene que es súper válido y normal querer, con el paso de los años, crear nuevos espacios verdes o cambiar la disposición de las plantas.

En este caso, se montaron nuevos canteros a partir de la división de especies que a la dueña de casa le gustaban. Entre las que se trabajaron estuvieron: la Salvia, Pasto Palmera, Dietes.

Al borde de una de las paredes exteriores, se creó un cantero que acompaña la forma circular de la pared. Se utilizaron ladrillos, o bien flejes, que contienen a las plantas hasta que crecen y toman su volumen final. Las protege mientras se corta el césped, y no menos importante, ¡queda prolijo a la vista!

Se plantaron allí especies cuyas flores siguen la paleta de colores del jardín: rosa, lila y blanco. Algunas de las que se colocaron fueron: Floripondios, Rosas Floribundas, Anémona Japónica, Achilleas, Perovskia, Dalias, y un arbusto llamado Buddleja Davidii, que atrae mariposas. Por su parte, los Margaritones aportaron un toque amarillento.

Limpieza de Rosas

Si bien la poda “fuerte” de rosales se lleva a cabo durante el mes de julio, es necesario quitar cuidadosamente el exceso de brotes en aquellas rosas que hayan concluido su ciclo.



El suelo y su magia

Ita explica que en el paisajismo ecosistémico, no es necesario carpir o picar el suelo, como se acostumbra, y nos ofrece el siguiente dato: El 95% de los nutrientes que la planta toma están en la superficie, por lo tanto, si damos vuelta la tierra, los perderemos.

Para evitar el crecimiento de yuyos en el cantero trabajado, se aplicaron chips de corteza de pino a la tierra. También es recomendable agregar compost por encima, y hasta hojas caídas del jardín, que sobran en esta estación. “Las tiramos en el cantero; allí se descomponen y vuelven al suelo en forma de nutrientes”, explica la experta.

Más y más movimientos

En otro de los canteros, se buscó conservar las especies existentes. Ita sumo gramíneas, entre ellas plumeritos que tomó del fondo del jardín. También incorporó Espigas; Salvias que atraen abejas; Lavandas; Dietes, que no necesitan ser podados; Floripondios; Cubresuelos, entre otras.

Explica que con la combinación de las diferentes especies fue generando un “ritmo” en los canteros, y variedad de alturas. Asegura que para el verano próximo los nuevos espacios tendrán más volumen y se verán mucho más bellos.

@itasflowers hace hincapié en la importancia de seleccionar cuidadosamente la ubicación de cada planta, sin olvidar factores como el aroma, y ejemplifica: “Hay especies como la Tulbaghia, que tienen un olor muy fuerte, similar al de la cebolla, por eso no puede estar cerca de una galería”.

Adaptarnos a los cambios de la naturaleza

El jardín es dinámico, y a medida que las especies crecen, la sombra va cambiando de lugar. Por eso la paisajista no tardó en llevar las plantas que necesitan sol al sector correspondiente, y las de sombra, valga la redundancia, a la sombra. A las rosas que estaban recibiendo sombra en uno de los canteros, por ejemplo, se las trasladó hacia un cantero sobre el borde de la pileta. María Laura admite que no es la mejor época para trasplantarlas, pero sostiene que a veces la necesidad nos obliga a hacerlo.

En ese mismo cantero, agregó la paleta del naranja con una Lantana Camara. Se hizo división de Agapanthus, colocó bulbos de Dalia, y entre otros movimientos, trasladó la Salvia Leucantha a la terraza de la casa en macetas.

Sobre el cerco de la pileta ubicó una Olea Texana, ya que es un arbusto que logra desarrollarse tanto en sol como en la media sombra, y lo combinó con un Jazmín de Leche para disfrutar de su agradable perfume.

Alocasia: una gran aliada

En cuanto llegó al jardín, María Laura notó que los autos y los vecinos interferían en el paisaje. Para cubrir un poco la vista, plantó Alocasias que ya tenía la dueña de casa en macetas. ¿Qué mejor que trabajar con lo que está a nuestra disposición?

¿Dónde ubicar una huerta?

Si la huerta contiene especies que dan fruto, necesitará entre 6 y 8 horas de sol. ¿Algo clave? ¡Que esté cerca de la cocina!

Macetas, siempre

El patio de la casa cuenta con macetas como protagonistas, que contienen Alocasias, planta ideal para el sol; Salvia Leucantha, y Espatifilum gigante, especie ideal para la sombra o para interior, de color verde oscuro y claro.


A tener en cuenta: Nuestro ojo tiende a buscar la armonía, por lo tanto, no es recomendable colocar un “popurrí” de macetas, sino mantener un mismo modelo y color, variando simplemente el tamaño para generar movimiento.

Al frente

En el camino hacia el jardín delantero, Maria Laura se topó con una Olea texana, y explicó que la mejor época para podarla es cuando termina de florecer. Para hacerlo correctamente, hay que cortar con la tijera a la altura de las brotaciones de las yemas que se encuentran a la par de la hoja, para que no se cuelen hongos, plagas ni humedad a través del tocón.

En el cantero delantero de la casa se agregaron Gauras y Anémonas Japónicas rosadas para respetar la paleta de colores ya existente.

En las superficies donde tanto el sol como la sombra dicen “presente”, como ocurre en este caso en el jardín lateral, es importante contar con un porcentaje de especies persistentes que le den forma al cantero todo el año.

Ita se tomó unos minutos para destacar la Asclepias Curassavica, una planta ideal para la sombra, muy conocida por su capacidad para atraer a los pulgones, además de mariposas. Remarca que no hay que fumigarla. 

María Laura Vidal Bazterrica – Paisajista – @itasflowers

Contacto: 15-4991-6073 – marialauravidal@hotmail.com