Texto: María Laura Vidal Bazterrica
Como su nombre lo indica, la resiembra es sembrar al voleo. Para el césped generalmente se utiliza semilla Ryegrass anual o perenne sobre un césped ya implantado.
Esta tarea no es nada complicada y con solo tener en cuenta ciertos tips lograremos un césped de invierno envidiable para nuetros vecinos.
La selección de la semilla adecuada es muy importante ya que la calidad de esta se verá luego en la germinación. Hay un dicho popular que dice “lo barato sale caro” Y es tal cual.
No debemos utilizar la semilla del año pasado ni comprarla en supermercados. La semilla para la resiembra otoñal deberá ser de este año: fresca, de alta calidad, comprada en viveros y agropecuarias o en semillerías.
Es necesario gastar un poco más y aplicar un fertilizante para lograr un buen arranque de la semilla en su germinación.
¿Por qué debo resembrar cada año?
La resiembra se realiza para mejorar el aspecto del césped en los meses de invierno, sobre todo de aquellas especies que entran en su período llamado dormición. Ejemplo: Bermudas y Kikuyo.
Se recomienda realizar la siembra cuando la temperatura por debajo del suelo está entre 20 y 22 grados. Generalmente, en Buenos Aires es después de Semana Santa y antes de las primeras heladas.
Con la resiembra se protegen los rizomas del césped de las quemaduras del frío y de las heladas, para que llegada la primavera avanzada en octubre y noviembre comience a desaparecer el rygrass y brote el césped original. Además, el flúor viste el espacio, dándole color a la estación más gris del año.
¿Semilla anual o perenne?
Esto siempre dependerá de los metros cuadrados de césped que queramos plantar. Para un jardín urbano es recomendable la semilla anual, porque al ser el ciclo más corto y su germinación más rápida, es también más económico y desaparece apenas comienzan las temperaturas más cálidas y estables. ¿La desventaja? Todos los años se deberá resembrar
La semilla perenne tolera cortes bajos, tiene un verde más intenso pero necesita un paquete tecnológico de manejo más complejo: cortes verticales, mayor fertilizante, más cantidad de riego y en primavera si no desapareció, será necesario aplicar algún herbicida selectivo para que no compita con la carpeta existente. Ventaja: no es necesario resembrar al año siguiente y queda en dormición durante la primavera y el verano. Es recomendable para espacios grandes como cancha de golf, canchas deportivas, campos, chacras, plazas o parque grandes.
Paso a paso:
-Si existen malezas en el terreno, primero hay que combatirlas aplicando un herbicida selectivo y siguiendo atentamente las indicaciones de la etiqueta del producto en cuanto a la dosis y la forma de aplicación.
-Revisar pronósticos para verificar que no tengamos tormentas fuertes por 10 días (caso contario lavaría la semilla y se sufrirán grandes pérdidas).
-Cortar el césped existente lo más bajo posible para que la semilla mezclada con arena mediana penetre bien y llegue a tocar la tierra. El secreto está justamente en que esa pequeña semilla debe quedar fijada al suelo lo más posible y no apoyada en las hojas del césped.
-Aplicar 5 kg de semillas por cada 100 m2 de césped.
-Aplicar el fertilizante junto con la semilla. Serán necesarios 500 kg de fosfato de amonio por cada 100 m2 de césped para que actúe en forma inmediata a la germinación.
-Regar suavemente dos o tres veces al día. La semilla brotará por humedad y no por cantidad de agua.
Es muy importante que no le falte agua los diez primeros días y que no se pise hasta el primer corte que será cuando la semilla tome una altura de 10 cm.
-Importante: guardar un 10 % de la semilla aplicada para reponer luego del primer corte en aquellas zonas donde no germinó.
-Una vez llegada la primavera deberemos volver a fertilizar la carpeta. Pero esa será una tarea para la primavera.
Ahora podemos tener un jardín más verde, ¡manos a la obra!
