Los alimentos orgánicos, se volvieron muy populares en los últimos años, acompañando el interés de muchas personas que buscan un cambio positivo en la alimentación. Diferencias entre alimentos orgánicos y naturales. Cómo afecta a la alimentación a los niños.
Un alimento orgánico no es igual a un alimento natural. La diferencia radica en que cuando hablamos de alimento orgánico, no sólo nos referimos al alimento en sí, sino también a cómo este alimento fue producido.
Orgánico, natural y saludable tienen diferentes significados:
- Los alimentos orgánicos son cultivados sin pesticidas artificiales, fertilizantes o herbicidas.
- Los alimentos naturales están libres de ingredientes sintéticos, artificiales o aditivos.
- “Alimentos saludables” es un término general que se puede aplicar a los alimentos naturales u orgánicos, o a los alimentos regulares que han pasado por menos procesamiento de lo usual, como las harinas molidas en piedra o de grano entero.
Alimentos orgánicos
Los alimentos orgánicos deben sembrarse haciendo uso de métodos de agricultura orgánica, es decir que reciclen los recursos producidos y promuevan la biodiversidad, dos elementos considerados claves en una agricultura sustentable.
Las frutas y verduras orgánicas se producen sin pesticidas convencionales o fertilizantes químicos, no han sido modificados genéticamente y generalmente provienen de suelos balanceados en los que crecen plantas fuertes y ricas en nutrientes.
Por otro lado, los animales crecen en espacios amplios y aireados. Idealmente se alimentan de pasturas, y en el caso de las aves comen libremente plantas e insectos que encuentran a su paso, o son alimentados con granos que no han sido modificados genéticamente. Lo más importante es que NO se les suministran hormonas ni antibióticos para su crecimiento.
Un producto orgánico es aquel que está certificado por una autoridad competente. En Argentina, la Cámara de Certificadoras nuclea a las empresas habilitadas por el Estado para tal fin. Se define como orgánico un sistema de producción diferenciado cuyo resultado es un alimento libre de químicos y sustancias tóxicas reales o potenciales para la salud humana.
Lo orgánico y los bebés
Los bebés y los niños son cuatro veces más susceptibles que los adultos a los químicos y los absorben más fácilmente. Sus órganos están en desarrollo y el sistema digestivo no es capaz de eliminarlos. Algunas de estas sustancias pueden bloquear la absorción de nutrientes vitales para un crecimiento y desarrollo saludable.
A pesar de esto, es muy importante que los bebés consuman frutas y verduras porque está comprobado que el impacto de que no tengan una dieta variada, balanceada y colorida es mucho mayor al riesgo potencial que representan este tipo de sustancias.
Orgánico y saludable
Muchos productos para bebés están llenos de azúcar y otros ingredientes que no son saludables para ellos.
Las papillas orgánicas son un aliado fundamental para padres modernos: son ricas, accesibles y muy prácticas. Se pueden comprar en farmacias o supermercados, pero hay que estar atentos a:
+ Que no contengan azúcar ni edulcorantes agregados
+ Que no tengan ni muy bajo ni muy alto contenido calórico
Es fundamental consultar con el médico especialista antes de dar papillas y compotas al bebé ya que será un profesional de confianza quien aconseje qué frutas y vegetales son recomendables para cada etapa.
Siempre hay que comprar productos frescos, locales y de estación y que los niños consuman comida hecha en casa. Acostumbrarlos a comer bien puede ser un gran paso para evitar futuras enfermedades como el sobrepeso, la obesidad, la hipertensión arterial y la hipercolesterolemia.
Cabe destacar que la introducción de los alimentos semisólidos durante el primer año del bebé son un complemento de la leche materna o las fórmulas infantiles especialmente diseñadas, que siguen siendo el alimento principal.
Por Dra. Florencia Nemirovsky, (MN 102670)
Médica pediatra nutricionista y asesora de NutriBaby Argentina.
+Info en: www.nutribaby.com.ar
