Texto: María Laura Vidal Bazterrica – Paisajista – @itasflowers

«El secreto del éxito en el jardín está en hacer lo adecuado en el momento justo”

Suenan sencillas estas palabras, pero muchas veces nos desanimamos ante los fracasos que vivimos con nuestro jardín. Siempre resulta más fácil si contamos con una guía de mantenimiento que nos ayude a ir progresando cada semana, según los tips y tareas a realizar para llegar a ser el jardinero perfecto. 

La idea es ir detallando mes a mes el paso a paso de lo que iremos haciendo en el jardín. Arrancamos con enero: ¡cuaderno, lápiz, guantes y agua fresca!

  • ¿En qué piensa un buen jardinero?

– Terminar de plantar las flores de temporada en canteros o en macetas con buen compost. Regar enseguida, sin mojar las flores. Pueden ser: Alegrías del Hogar, Aceranthus, Petunias, Alyssum.

– Trepadoras: guíe los brotes nuevos, atándolos con piolín, nunca alambre para que no se lastimen los tejidos. Pueden ser: Clematis, Solarium, Santa Rita, Rosales.

– Césped: se regará diariamente cuando se encuentre a pleno sol. Recoger su corte para utilizarlo en la compostera y colocar en la base las especies plantadas nuevas, así protegeremos sus raíces de los fuertes rayos del sol. Aprovechemos las vacaciones para realizar una micro nivelación con arena y tierra abonada. Puede aparecer algún ataque tardío de grillo topo. ¡Estar atentos!

– Riego: nunca regar con el sol fuerte porque desperdiciaremos agua y no será efectivo el riego. Es adecuado hacerlo muy temprano o a la tardecita. 

– Poda de arbustos: es importante realizar una poda despunte a todos las especies que hayan culminado su floración para lograr así estimular la formación de renuevos basales y evitar que la planta solo crezca hacia arriba sin ensancharse. Ejemplo: Berberis, Jazmín de leche, Jazmín del Cabo y Salvias. Agregar enseguida una buena dosis de compost y humus de lombriz.  

– Árboles: chequear el tronco de hormigas y sus tutores. Agregar una buena capa de mulch para evitar que sufran el calor. Muchas veces, frente al aire caliente y las altas temperaturas, los árboles liberan parte de su follaje para transpirar menos. No preocuparse, cuando cambie el clima se recuperará. 

– Control  de plagas: época de ataque de pulgón y cochinilla, chequear los brotes nuevos y el envés de sus hojas. Allí suelen alojarse. Combatirlos con productos específicos. Ante la duda, llevo una muestra al vivero, para que me asesoren mejor. ¡Atención jardinero!

– Florales: sembrar semillas de Alhelí en un rincón del jardín para trasplantarlos en otoño y que den flor en primavera. Guiar los Gladiolos con tutores, ya que con el peso de su flor se romperán. 

– Podar con despunte las lavandas para evitar que se vayan en altura. 

– Eliminar las flores marchitas de las Margaritas, Verónicas, Geranios y Malvones. 

– Señalar el lugar donde están los bulbos ya florecidos y el follaje seco para evitar lastimarlos cuando removamos la tierra.

– Podar las flores vivaces para estimular su segunda floración: Salvias, Gauras, Nepetas. 

– Recoger el agua de lluvia en baldes y utilizarla para regar las plantas de interior. Chequear su drenaje y agregarle compost (un puñado por planta es la medida mínima a agregar).

– Macetas: rotar 180 grados cada mes para evitar que la planta forme espalda. Es muy importante que la macetas estén impermeabilizadas. Agregar, una vez por mes, compost y regar todos los días a pleno sol, y cada dos o tres días cuando está a media sombra. 

– Chequear que no se haya tapado el orificio de drenaje de la maceta, habitual cuando tiene varios años. 

– Invernáculo: ventilarlo todos los días abriendo sus puertas. Hacer esquejes de arbustos que hayan florecido como Prímulas y Cinerarias. Para controlar la mosca blanca, pongamos cartulinas amarillas con pegamento colgadas en varios lugares, así las moscas se sentirán atraídas y se quedarán pegadas. 

– Estanque: reponer el agua diariamente ya que se evapora por el calor. Cubrir, como mínimo, dos tercios del estanque con plantas acuáticas para mantener así una relación óptima. 

– La huerta: aplicar una buena medida de compost a toda la superficie y remover el suelo con cuidado. 

– Habas: despuntar los extremos tiernos para no atraer al pulgón negro.

– Tomates: atarlos con cordón de algodón a los tutores que tendrán un mínimo de 90 cm de alto. Despuntar las ramas basales para ayudar a que penetre el sol. 

– Podar la flor del orégano y ponerlo a secar para luego. Desinfectar la flor con calor y guardarla en frascos esterilizados previamente.

– Sembrar lechugas, rabanito, escarola, nabo, zanahoria, remolacha, calabacín, espinaca, rúcula y tomate cada 15 días para tener una cosecha escalonada. 

¡Ahora sí seremos nuestros propios jardineros con éxito!

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